Me considero un romántico sensible soñador, un seductor hombre con la habilidad de amar y ser amado, un talento inocente del universo producto de muchas noches de sudor, un buen besador que tus labios nunca quisieran olvidar, un exquisito amante de tus secretos, un conquistador de caricias y un naufrago en la orilla de tus deseos dispuesto a hacerlos una dulce e incomparable realidad
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